Arqueólogos, antropólogos y las comunidades indígenas de Guatemala están haciendo un llamado urgente al gobierno guatemalteco para que rechace un polémico proyecto de ley afectando la administración de los sitios arqueológicos del país. Refiere a la Ley 5923, denominada “Rescate de Patrimonio Prehispánico”, que ha sido planteada de urgencia nacional tanto por el Ministerio de Cultura y Deportes, así como por la mayoría de diputadas y diputados del Congreso.
Sin embargo, los opositores de la legislación dicen que tendría el efecto de privatización de sus centros ceremoniales para beneficio de unos pocos y bloquearía el acceso y participación del pueblo maya en el desarrollo de sus sitios ceremoniales tradicionales más importantes, incluida la antigua ciudad de Tikal.
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El Proyecto Esperanza se sentó con los Ajq’ij o Contadores de Tiempo Tat José Baudilio Sis, Nan Amalia Tun, junto con Adriana Álvarez del Instituto Cuatro Mundos para escuchar sus preocupaciones. Nos contaron algo del proceso y su trabajo para detener esta legislación, que ven como un ataque directo a los derechos indígenas en violación de convenciones internacionales que garantizan el consentimiento previo, libre e informado sobre asuntos relacionados con tierras indígenas y sus sitios sagrados.
Compartimos una versión editada de la entrevista.
Tat Baudilio, ¿puedes comenzar presentándote y contándonos un poco sobre tu papel en tu comunidad y sobre este tema?
Mi nombre es José Baudilio Sis y soy Coordinador Ejecutivo del Consejo de Ajq’ijab’ B’alam Saqb’e, e integrante de la Alianza de Ajq’ijab’ Paxil Kayala. Ajq’ij significa contador del tiempo desde la cosmovisión maya. Y parte de lo que hacemos en la comunidad es apoyar a nuestra gente, a nuestro pueblo e interpretar de otra manera la vida, la existencia.
La lucha que estamos haciendo es debido a que a pesar de que existen muchas leyes que hablan de derechos humanos de los pueblos originarios, leyes nacionales e internacionales, en varias realidades como el caso nuestro en Guatemala, no se respetan, no se valoran ni se implementan como debiera ser. Y es por eso que lo poco que hemos logrado que se cumpla ha sido a base de luchas, a base de exigencias, a base de no dejarnos.
Actualmente tenemos como tema sobre la mesa detener la iniciativa de ley 5923, que habla sobre el “rescate del patrimonio prehispánico”.
Las autoridades le llaman “ruinas” a los sitios arqueológicos. Conceptualmente comprendemos que una ruina es algo que ya no es útil, que ya no sirve, entonces para nosotros ese calificativo es ofensivo. No es justo que le digan ruina a las casas antiguas de nuestros ancestros. Para nosotros es una reliquia, es un tesoro que está ahí.
También ellos le llaman “sitios prehispánicos”. Esa es otra ofensa para nosotros, porque no es prehispánico. Los mayas aquí estamos, estamos vivas, estamos vivos.
Y ahora ellos quieren hacer lo que se les ocurra con estos tesoros sagrados que le llamamos nosotros. El gobierno ve los sitios arqueológicos como recursos únicamente para el turismo, mientras que nosotros los vemos como lugares sagrados de conexión energético-espiritual con nuestra existencia.
Muchas gracias, Tat Baudilio. Nan Amalia, si a ti te gustaría hacer lo mismo: preséntate y habla un poco sobre tu papel en su comunidad y también en esta lucha.
Nan Amalia: Gracias por el espacio y también por la conexión. Represento el Consejo de Ancianos Iq Balam, e integrante de la Alianza de Ajq’ijab’ Paxil Kayalá. Y estamos en la lucha en todo momento, porque todo lo que nos han dejado nuestros ancestros, ese legado ancestral que nos dejaron plasmado en nuestros sitios sagrados, para nosotros los mayas actuales es la resistencia, mantener viva siempre nuestra cultura, mantener vivo el fuego sagrado en cada momento y al mismo tiempo también mantener vivo ese balance, ese equilibrio con la naturaleza, con el cosmos.
Para el Estado o para el Ministerio de Cultura, estos lugares son simples centros recreativos o centros arqueológicos que sólo son para sacar dinero, y para el turismo. Entonces ahí ellos no miran la parte energético-espiritual. Pero para nosotros las y los Ajq’ij estos son sitios energéticos especiales donde acudimos para celebrar nuestras ceremonias maya en las diferentes formas, donde vamos a celebrar nuestra ofrenda ceremonial para el Gran Creador, las grandes energías creadoras y formadoras como la Madre Tierra y el Cosmos. Ahí está viva toda la esencia de nuestras y nuestros ancestros.
Para nosotros es importante que el gobierno nos tome en cuenta para su coordinación o para su protección, que también nosotros, como Aqj’ij, fuéramos pilares para decir al extranjero que venga qué significan estas pirámides, porque ahí está plasmada una historia milenaria desde su raíz y nuestras prácticas orales aún siguen vivas.
Como decía Tat Baudilio, la iniciativa de ley que está promoviendo el Ministerio de Cultura nos tiene a nosotros los pueblos discriminados porque no nos tomó en cuenta, primero porque no consultó a los pueblos y nosotros no estamos de acuerdo con esa iniciativa de ley. Entonces esa es nuestra lucha hoy en día, el rechazo hacia muchas leyes que vienen a violar el derecho a la naturaleza, el derecho a la vida, en especial la práctica ancestral que han dejado nuestras abuelas y nuestros abuelos.
Muchas gracias Nan Amalia y Tat Baudilio. Sin duda es un momento sumamente importante en cuanto a lo que mencionan, el despertar de las culturas, porque la verdad lo necesitamos mucho. ¿Nos pueden explicar un poco sobre el proceso que han pasado con esta propuesta?
Tat Baudilio: Este proyecto de Ley pasó la primera y segunda lectura sin oportunidad de ser conocida, mucho menos discutida por las y los actores de derecho histórico como lo son los pueblos originarios, en especial la población de la cultura Maya quienes representan la mayoría de la población guatemalteca.
El día 11 de mayo, iba a pasar la tercera y última lectura, cuando las y los Ajq’ijab’ — Contadoras y Contadores del tiempo, guardianes del territorio y de la biodiversidad, transmisores de la sabiduría ancestral para el Utzalaj K’aslemalil, o Buen Vivir), nos presentamos en el Congreso de la República solicitando de manera escrita y verbal, el rechazo de la iniciativa de Ley 5923 “Rescate del Patrimonio Prehispánico”.
Ese día, después de largas horas de petición, finalmente la presidenta de la Junta Directiva del Organismo Legislativo, licenciada Shirley Joanna Rivera Zaldaña, atendió a las y los representantes de varios grupos organizados de Ajq’ijab’, en donde finalmente la señora presidenta juró no continuar con el proceso de la tercera lectura de dicha iniciativa, sino hasta después de realizar una reunión de aclaración del propósito real de dicha iniciativa, que según ella, “las y los Ajq’ijab’ desconocían y aseveraba que han sido engañados”, por lo que la señora presidenta junto con sus asesores, plantearon que dicha reunión se realizaría el día jueves 2 de junio a partir de las 9 horas.
Sin embargo, dos días antes del 2 de junio, la señora presidenta envía un mensaje de texto a representantes de las y los Ajq’ijab’, informando que se suspendía la reunión, porque tenía otro compromiso más importante. Frente a esta actitud, las y los Ajq’ijab’ enviamos una solicitud por escrito, para solicitar que la reunión suspendida se retome el día jueves 16 a partir de las 9 horas, solicitando para el efecto, respuesta por escrito, porque en la calidad de Ajq’ijab’ como autoridades de los pueblos originarios, necesitamos presentar evidencias de las gestiones, pero frente a dicha solicitud, no se tuvo respuesta. Ahora las y los representantes de los pueblos originarios nos enteramos que las y los diputados del Congreso de la República han entrado a sus tiempos de vacaciones y regresarán hasta el 15 de agosto.
Entiendo, debe ser muy frustrante. Ahora hablando de este proyecto de ley, ¿qué tiene que ver con el arqueólogo estadounidense Richard Hansen y su megaproyecto turístico en El Mirador?
Tat Baudilio: Está altamente relacionado debido a que es uno de varios proyectos. Hay un proyecto binacional que se ha firmado ya entre México y Guatemala, que esto se relaciona más con la construcción de tres represas sobre el río Usumacinta. El gran río Usumacinta que divide a los dos países, entonces el construir represa de hecho toca territorio maya y territorio mexicano.
El gobierno no está esperando la aprobación de la iniciativa de Ley 5923, porque en el segundo trimestre del presente año, ya ha inaugurado grandes proyectos tales como la construcción de un museo “Caracol del Tiempo” en el sitio arqueológico de Tak’alik Ab’aj del municipio de El Asintal, departamento de Retalhuleu (proyecto inaugurado por primera vez en el 2006, reinaugurado en el 2012, y nuevamente inaugurado el 14 de mayo del 2022 por el presidente Giammattei), así como la inauguración de la restauración del Sitio Arqueológico de Tayasal, municipio de Flores, departamento de Petén.
Entonces esta ley daría como vía libre, sería como la puerta que se estaría abriendo para que estos megaproyectos se logren realizar. Concretamente, para tener una idea, esta iniciativa de ley 5923 está dirigida fundamentalmente para que el gobierno pueda “rescatar” estos espacios, los centros arqueológicos, como le llaman ellos. Ese rescate en el fondo lo que trata al final es que después se puedan dar en concesiones estos sitios. Y las concesiones nosotros ya sabemos que no las van a ganar las comunidades, ni los grupos organizados de los pueblos originarios, sino se los va a dar a las grandes empresas — y eso significaría automáticamente la privatización de los centros arqueológicos.
Puntualmente están hablando de tres lugares en concreto: Tikal, Kiriwá y Tak’alik Ab’aj. De estos tres, ya avanzaron con la inauguración del proyecto en la parte sur de Guatemala, en el centro arqueológico que se llama Tak’alik Ab’aj, que traducido al castellano le dicen “Piedra Parada.”
Tak’alik Ab’aj es un centro arqueológico antiguo, que tiene historia, incluso desde la cultura Olmeca, y por ahí se va a construir un gran museo. Ya inauguraron el proyecto en el mes de mayo, sin que la ley estuviera aún autorizada. Por eso esta iniciativa de ley el gobierno la plantea como de urgencia nacional. Le llaman urgencia nacional porque ellos ya empezaron a firmar los convenios.
Entonces en esta parte sur está el primer proyecto y en la parte oriente del país, en otro centro arqueológico que se llama Kiriwá, este es otro de los puntos donde quieren trabajar. Esto conecta con el Océano Atlántico, y el de Tak’alik Ab’aj, es la conexión con el Océano Pacífico. Por la parte norte está la gran ciudad de Tikal. Es el centro arqueológico Tikal, entonces es el otro que tienen, que ya están en esos planes de arrancar la ejecución de proyectos.
Aparentemente no aparece El Mirador en esta primera fase que tienen, pero como decimos, sería un megaproyecto que vendría después. No aparece todavía El Mirador que está más a cargo de Hansen y en el otro que también sabemos que se va a implementar en México, es el Tren Maya. El Tren Maya va a llegar directamente al lado norte y eso estaría colindando con Guatemala, por lo que lo vemos como otra gran amenaza para la afectación de nuestra práctica y nuestra sabiduría ancestral.
Tat Baudilio: Nosotros como pueblos originarios no estamos en contra del desarrollo. Es un derecho, y la sabiduría es un derecho universal. Queremos compartirla, pero que no nos excluyan en la elaboración de las leyes, mucho menos en los beneficios que deja que hermanas y hermanos de otros países vengan a conocer nuestra cultura. Queremos ser guardianes de nuestro propio territorio para administrarlos entre el gobierno y las autoridades ancestrales.”
Nan Amalia: “Está bien que se haga la restauración de los sitios sagrados, que se cuide con todos los ingresos que entran. Porque ya hoy en día entrar a Tikal a caminar pues todo es pagado y hasta hay que ir a pagar al banco antes de entrar. Entonces creemos que si hay fondo como para mantener y para que todo el medio ambiente, los árboles, la naturaleza que se mantenga.”
Tat Baudilio comentó que en las leyes donde se hable del manejo de estos sitios es importante garantizar que todos los mayas puedan tener acceso gratuito a los sitios sagrados y que es necesario que los Aj Q’ij tengan la facultad de ingresar en horarios fuera de los tiempos de visita para poder realizar sus ceremonias sin ser interrumpidos por los turistas, o para llevar a cabo sus ceremonias nocturnas.
Desgraciadamente, explica, aún existe mucha discriminación e ignorancia en la sociedad y aunque existen leyes y acuerdos donde se garantiza el derecho de los pueblos indígenas a llevar a cabo sus ceremonias sin ser molestados, en la realidad aún existe mucha persecución y violencia, al grado de que en los últimos años ha habido casos de abuelos mayas que han sido secuestrados y hasta quemados por ser acusados de practicar brujería.
“Por eso nosotros reclamamos al gobierno. Mientras ellos le sacan ganancia a la sabiduría de nuestros ancestros, a las casas grandes, que son los sitios arqueológicos de nuestros ancestros, que se andan preocupando para decir que para eso si se necesita una ley que es de urgencia nacional. Pero no hablan de las leyes de urgencia nacional para proteger nuestras vidas.”
Es por ello que Ajq’ijab’ de Paxil Kayalá (Contadoras y Contadores del Tiempo desde la Cosmovisión Maya de los pueblos originarios), en coordinación con Alcaldías Indígenas, organizaciones de arqueólogos, antropólogos, otras redes profesionales del país de Guatemala, C. A., sumado las acciones de solidaridad de organizaciones internacionales tales como el Movimiento Mundial “Ciudadanos por la Vida y la Libertad”, el Movimiento Mundial “Guardianes de la Vida y la Paz de la Madre Tierra”, el “Consejo Ancestral de Abya Yala Unificado”, entre otros, están haciendo un llamado urgente a la población de cualquier país, profesión, rubro, a que apoyen a detener ésta y otras iniciativas de ley que dañan y excluyen a los pueblos originarios.